Charlotte de Naranja
Con esta breve nota iniciamos esta sección que esperamos sea de su total agrado.
Este postre es uno de los más conocidos, forma parte de la alta repostería y es delicioso, mas su historia sugiere que no siempre se vio igual.
La Carlota o Charlotte (fr.) tiene su origen en Inglaterra y debe su nombre a la reina consorte del rey Jorge III. La Charlotte solía servirse tibia y era preparada con panes untados de mantequilla puestos en un molde redondo, se rellenaba con una compota (mermelada) de manzana aromatizada con canela y limón, se metía al horno y se servía tibia con crema encima. A esta forma de servirse se le conocía como Charlotte de frutas.

Este postre llegó posteriormente a Francia, donde el maestro de cocina Marie-Antoine Carême (!784 - 1833) -de quien escribiremos después- modificó la receta y la transformó en un postre frío, postre que se conoció como <<Charlotte parisién>> o Carlota a la parisina. Tiempo después de la muerte de Carême, debido a la fuerte influencia de la nobleza rusa, este postre cambió su nombre por <<Charlotte russe>> o Carlota a la rusa.
El concepto de Carlota que propuso el maestro Carême sigue vigente al día de hoy. Consiste en unas soletillas dispuestas en un molde circular, con crema bavarois y helado en vez de horneado. Al día de hoy la crema puede sustituirse por alguna otra preparación similar como mousses de frutas y decorarse con frutas y/o chocolate.
En Crisal presentamos esta variación elaborada a partir de una crema bavarois de naranja, soletas y cubierta con nuez molida; un postre delicioso que no te puedes perder. En nuestra sección de productos puedes consultar nuestro catálogo completo, y si tienes alguna duda puedes contactarnos a través de nuestras redes sociales.
Referencias
La información para esta nota se ha tomado de: